domingo, febrero 16, 2020

Que payasa te has vuelto

Ojalá nunca te hubiera mandado ese mensaje de texto diciéndote que mis piernas te extrañaban, y tú nunca me hubieras contado que pasaste la tarde en una iglesia tomando fotos y pensando en mi.

Ojalá nunca hubieras sido honesto y ojalá yo nunca hubiera creído todas tus mentiras.

Ojalá nunca te hubiera besado con los labios húmedos en ácido. No quería tu viaje. No quería un nuevo mundo. Nunca te pedí un tercer ojo y mucho menos que enterraras lo mejor de mi.

No te extraño, no te pienso, te llevo conmigo como un recuerdo de cómo mi vida se transformó;
pero tampoco es tu culpa, eres de 1979, no puedes aspirar a cambiarle la vida a alguien después de que aspiraste todas las drogas de la ciudad.


No hay comentarios: